Tener parásitos intestinales puede ser un pensamiento aterrador; sin embargo, no estás solo. Te sorprendería saber la frecuencia con la que los parásitos intestinales son los culpables de los problemas de salud, desde los síntomas de problemas digestivos hasta insomnio, problemas de la piel, nerviosismo, cambios en el apetito, pérdida de peso y mucho más.
La idea de que los parásitos solo existen en países muy pobres es un mito. En este artículo, compartiré 12 señales que indican que podrías tener un parásito intestinal y cómo obtener las pruebas y el tratamiento adecuados.
Tabla de Contenidos
¿Qué son los parásitos intestinales?
Un parásito es cualquier organismo que vive y se alimenta de otro organismo. Cuando me refiero a parásitos intestinales, me refiero a pequeños organismos, generalmente gusanos, que se alimentan de su nutrición. Los parásitos intestinales viven exclusivamente en los intestinos.
Algunos ejemplos de parásitos generales incluyen: gusanos redondos, giardias, amebas, tenias, áscaris lumbricoides o lombrices intestinales, gusanos látigo, anquilostomas y más. Debido a que los parásitos intestinales vienen en tantas formas y tamaños diferentes, pueden causar una amplia gama de problemas.
Algunos parásitos consumen los nutrientes de tu comida, dejándote con hambre después de cada comida y sin poder ganar peso. Otros se alimentan de sus glóbulos rojos, causando anemia. Algunos ponen huevos que pueden causar picazón, irritabilidad e incluso insomnio.
Si ha intentado innumerables enfoques para sanar su intestino y aliviar sus síntomas sin éxito, un parásito podría ser la causa subyacente de muchos de sus síntomas inexplicables y no resueltos.
¿Cómo adquieres parásitos intestinales?
Hay varias formas de contraer una parasitosis. Es cierto que el agua contaminada de países subdesarrollados es una fuente común de parásitos. Sin embargo, también se encuentran con frecuencia en carne poco cocida, frutas y verduras sucias o contaminadas, y lagos, estanques o arroyos. Algunos parásitos pueden incluso ingresar al cuerpo al viajar por la parte inferior de su pie.
Una vez que una persona se infecta con un parásito, es muy fácil pasarlo. Si tiene un parásito y no se lava las manos después de usar el baño, puede pasar huevos microscópicos de parásitos a cualquier cosa que toque: la manija de la puerta, el salero, el teléfono u otras personas. También es muy fácil contraer un parásito cuando se manejan animales.
¿Hay signos ó síntomas de parásitos intestinales?
Existen muchísimas señales para detectar los parásitos intestinales.
Los signos de un parásito a menudo pueden parecer no relacionados e inexplicables. Como mencioné anteriormente, existen MUCHOS tipos diferentes de parásitos a los que estamos expuestos en nuestros entornos. Normalmente, veo parásitos que causan más estreñimiento en los pacientes que la diarrea, pero algunos parásitos son capaces de cambiar el equilibrio de líquidos en el intestino y causar diarrea.
Los problemas para dormir, las irritaciones de la piel, los cambios de humor y el dolor muscular pueden ser causados por las toxinas que liberan los parásitos en el torrente sanguíneo. Muchas veces, estas toxinas causan ansiedad, que puede manifestarse de manera diferente. Por ejemplo, despertarse en la mitad de la noche o rechinar los dientes mientras duerme son signos de que su cuerpo está experimentando ansiedad mientras descansa. Cuando estas toxinas interactúan con sus neurotransmisores o células sanguíneas, pueden causar cambios de humor o irritación de la piel.
12 señales que sugieren parásitos intestinales
- Estreñimiento, diarrea, gases u otros síntomas inexplicables de origen gastrointestinal son muy frecuentes.
- Problemas para conciliar el sueño o despertarse varias veces durante la noche.
- Irritación de la piel o sarpullido inexplicable, urticaria, rosácea o eczema.
- Rechinando tus dientes en tu sueño.
- Picazón en la zona perianal. Los picores en la zona que rodea en ano también son una señal importante.
- Dolor en los músculos o articulaciones y la fatiga crónica también están asociadas a los parásitos.
- Fatiga, agotamiento, depresión o sensación frecuente de apatía.
- La alteración del apetito es una de las señales más relevantes que son sugestivos de parásitos. Nunca se siente saciado o satisfecho o también el opuesto, la pérdida de apetito son comunes cuando tienes parásitos.
- Diagnóstico de anemia por deficiencia de hierro.
- Viajar internacionalmente y tener diarrea del viajero mientras estaba en el extranjero.
- Historia de intoxicación alimentaria asociada a un cambio en la calidad del funcionamiento digestivo desde el episodio.
- Las mujeres que sufren con infecciones vaginales frecuentes también podrían estar con parásitos intestinales.
¿Cómo saber si tienes parásitos intestinales?
Los doctores pueden confirmar la presencia de parásitos intestinales identificando los gusanos o los huevos.
La mejor forma de detectar un parásito es realizar una prueba de materia fecal. La mayoría de los médicos harán una prueba de heces convencional si sospechan un parásito, sin embargo, estos no son tan precisos como las pruebas de heces integrales que se utiliza en medicina funcional.
¿Qué complicaciones hay por parasitosis intestinal?
Una parasitosis intestinal puede traer una serie de complicaciones a nuestra salud. Es claro que no toda parasitosis tendrá las mismas características, señales y/o complicaciones.
Para dar un ejemplo específico, les comento de la parasitosis más común en nuestra especie, la causada por Ascaris lumbricoides.
La complicación más comúnmente asociada a la parasitosis por áscaris lumbricoides es la obstrucción intestinal. La obstrucción puede ser tan importante que se requiera intervención quirúrgica.
¿Quieres comprar medicina para parásitos?
En muchos países hay venta libre de fármacos, pastillas y medicinas para eliminar parásitos tanto de adultos, como de niños. También se puede encontrar medicación para eliminar parásitos intestinales de perros y gatos y que normalmente son de venta libre.
Tratamiento farmacológico para parásitos intestinales
Una vez que se haya identificado el parásito, tu doctor le dará su medicación específica para la especie parasitaria que tienes. Dentro de los 3 medicamentos más usados para eliminar parásitos intestinales rápidamente en adultos están:
- Albendazol: combate gran parte de las parasitosis intestinales, tales como ascariasis, tricocefalosis, anquilostomosis, teniasis, giardiasis y otras más.
- Mebendazol: funciona destruyendo las funciones de las células responsables por la energía de los parásitos.
- Nitazoxanida: inhibe las enzimas de las células indispensables a la vida de los parásitos como enterobiasis, oxiuriasis, ascaridiasis, criptosporodiosis, blastocitosis, balantidiasis y isosporiasis.
Es importante dejar claro que no estoy recomendando la automedicación. Si sospechas que puedes estar con parásitos, mi recomendación es que busques un doctor de medicina interna lo más pronto posible para que te pueda evaluar.
¿Cómo prevenir los parásitos intestinales?
- Lavarse las manos con bastante agua antes de preparar los alimentos o comer y después de ir al servicio sanitario o letrina. Lavar las frutas, los vegetales y verduras que se comen crudas
- Enterrar diariamente las basuras de las casas; o echarlas al carro recolector, así se evitan los criaderos de moscas, ratas o cucarachas que transmiten enfermedades.
- En aquellos lugares donde no hay agua potable, hervirla por 10 minutos o ponerle cloro(tres gotas de cloro por cada litro de agua)
- Tener un sistema adecuado de disposición de excrementos (como primera medida tener letrina o interior de agua)
- Alimentarse adecuadamente y en forma balanceada
- Mantener la vivienda, los pisos, las paredes y los alrededores limpios y secos
- Evitar el contacto de las manos y los pies con la tierra o la arena de aquellos sitios donde se sabe o se sospecha que existe contaminación fecal
- Evitar ingerir alimentos en lugares con deficientes condiciones higiénicas
Te invitamos a compartir la información que brindamos con sus amigos y familiares. Únicamente con educación podemos cambiar nuestra comunidad.
